La experiencia única de hospedarme en un antiguo ruedo de toros convertido en un hotel. El café, la lavandería y el bar me hicieron sentir como en mi propio hogar. La seguridad es impresionante, ¡nunca me he sentido tan protegida en un hotel!

Un poquito de luz y algunos pisos tambaleantes, pero nada que no se pueda superar.

Habitaciones con una cama de 4 postes.

Las camas eran super cómodas, la habitación era práctica, con un buen diseño.

El personal de recepción y del bar restaurante te hacen sentir como en casa. La ubicación es excelente, en el centro del pueblo y cerca de todo. Alojarse en una plaza de toros única en el mundo es una experiencia increíble. El hotel está bien conservado y las habitaciones son cómodas y bonitas. El desayuno fue regalo de la casa y también nos dieron botellitas de agua gratis todos los días.

Me sentí bienvenido, no tengo ninguna pega.

Nos encantó nuestra estancia en este hotel con encanto. La ubicación céntrica junto a la Plaza de Toros y la Oficina de Turismo fue perfecta. Las habitaciones eran limpias y con detalles encantadores. La atención de Amelia en recepción fue excepcional, brindándonos información útil sobre las actividades y lugares para comer. Aunque faltaba personal, no afectó nuestra experiencia en general. A pesar de algunas pequeñas molestias, recomendamos este hotel sin dudarlo.

La habitación era muy bonita y amplia, con una agradable decoración. El personal del hotel fue muy amable y nos brindó todo tipo de recomendaciones sobre qué visitar y dónde comer en esta histórica plaza de toros en el centro. Además, nos regalaron el desayuno y unas botellitas de agua todos los días. El edificio del hotel es muy peculiar y está muy bien conservado, considerando que es del siglo XVIII. Sin duda, este lugar nos ofreció una experiencia única y confortable durante nuestra estancia.

Recomendaríamos este lugar a todos.

Amplitud y comodidad de la habitación. Aparcamiento fácil y cercano. Restaurante El Trapío fantástico. Personal amable y atento. Decoración rústica preciosa. Temperatura agradable. Monumento del siglo XVIII.

Nada que disguste.

Lo mejor de este hotel es su ubicación céntrica, cerca de la Oficina de Turismo. Las habitaciones son amplias y acogedoras, con una decoración encantadora al estilo castellano. El personal del hotel nos trató muy bien y nos proporcionó todas las explicaciones necesarias. Además, encontramos fácil aparcamiento en la puerta del hotel.

No hay nada que no me haya gustado.

Personal amable, habitaciones amplias y tranquilas, ubicación conveniente cerca de puntos de interés. Hermosa plaza de toros con historia. ¡Volveremos! 😊

Me sentí como en casa. Las habitaciones son confortables y acogedoras, con un estilo castellano encantador. La plaza de toros histórica le da un plus al hotel. El personal es amable y proporciona explicaciones detalladas. La colaboración con la oficina de turismo es fantástica, ofreciendo visitas guiadas gratuitas por Almadén.

Me sentí muy cómodo, no tengo ninguna queja.

Camas con diseño bonito y práctico, ¡incluso tienen una con dosel! 🛏️

Edificio espectacular; Trato amable; Ubicación perfecta; Habitaciones cómodas; Peculiaridad histórica; Decoración agradable; Silencio absoluto; Personal atento.

Nada en absoluto de lo que quejarse.

Habitación enorme y cómoda. Ubicado en el centro.Personal atento y servicial.Emplazamiento único.

Nada de nada.

Habitaciones sencillas pero bien decoradas con una cómoda cama de cuatro postes, y el personal es amable. 😊

El hotel está ubicado en el centro, cerca de la Oficina de Turismo. Las habitaciones son cómodas y encantadoras, con aire acondicionado y camas nuevas. El personal es amable y servicial, te hacen sentir como en casa. se destacan las galerías que dan a la plaza, donde se puede disfrutar de una deliciosa cena en familia.

Quizás el minibar y las amenities del baño podrían mejorarse.